Da Gracias

¡Ser agradecido cambiará tu vida! La palabra de Dios dice, "Dad gracias en todo." (1 Tesalonicenses 5:16-18). Es un principio que cuando se aplica es una de las maneras más rápidas de cambiar tu actitud, tus circunstancias y toda tu vida. Incluso solo la palabra "Gracias", es una contraseña para el corazón. Hay una razón por la cual el primer paso para adorar y conocer más a Dios es simplemente venir ante su presencia, acercarse a él, entrar por sus puertas con acciones de gracias y alabanza. (Salmo 100:4).

Es el caso de nuestro Padre Celestial, no es porque Dios sea egoísta o necesite constantemente nuestra afirmación. Es porque sabe cómo te diseñó y creó. Ser agradecido es dar honor a alguien, y cuando tu das honor también das valor, y cuando das valor estás también dispuesto a recibir de esa persona. La persona más importante de la cual necesitamos recibir es de Dios. Darle valor y gracias a Él es la manera más rápida de disfrutar de su abundante presencia y cercanía.

Como padres, cuando nuestra hija de 5 años se acerca a nosotros y nos mira a los ojos y dice: "Gracias", nuestra respuesta inmediata es abrazarla, tomarla en nuestros brazos y buscar cómo podemos bendecirle y servirle. Nuestro Padre celestial es igual, su amor es real, constante y perfecto. Cuando aprendemos a estar verdaderamente agradecidos, primero abrimos espacio para una conexión real, segundo, comenzamos a recibir de Él, y tercero bendecimos Su corazón, que en realidad satisface nuestra identidad y el núcleo de quien somos.

La Palabra de Dios dice en 1 Tesalonicenses 5:16-18: “Estad siempre gozosos, orad sin cesar, dad gracias en todo” ¡Cualquier cosa que estés enfrentando en tu vida personal aprende del poder de la gratitud! Puedes empezar con nosotros ahora mismo como dice la canción Bravo: "Padre, gracias por Jesús, gracias por tu amor".